Existe alguna evidencia de que el yoga puede:
Contribuya a una mejor salud general al reducir los niveles de estrés, fomentar rutinas saludables, aumentar el bienestar emocional y mental y mejorar el sueño y el equilibrio.
Ayuda con las molestias de las rodillas artrósicas, el dolor de espalda y los dolores de cabeza por tensión.
Facilitar la pérdida de peso de quienes tienen sobrepeso u obesidad.
Los consumidores de tabaco necesitan su ayuda para finalmente dejar el cigarrillo.
Asistir a aquellos que están experimentando ansiedad o depresión como resultado de sus circunstancias actuales.
Reduce la angustia de la menopausia.
Ayudar a quienes se enfrentan a enfermedades a largo plazo a reducir sus sÃntomas y maximizar su calidad de vida.
Los practicantes de yoga mayores de 65 años deben tener especial precaución. Las lesiones sufridas al practicar yoga son más comunes en pacientes de 65 años o más en comparación con los adultos más jóvenes.
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